- Área: 336 m²
- Año: 2009
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Fotografías:Ricardo Abuauad
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La vivienda que se presenta se encuentra en un condominio en Chicureo, en la periferia norte de Santiago, en un terreno cuadrado de aproximadamente 70 x 70 m. El encargo consistió en una vivienda para una familia de dos adultos y tres hijos.
El gran tamaño del predio, su vegetación preexistente de espinos, y sus vistas lejanas a los macizos montañosos de los alrededores, hacían necesario una propuesta capaz de afectar una zona más amplia de aquella que la edificación cubriría.
El referente más claro de la obra es el conjunto de casas patronales edificadas en los valles agrícolas como éste durante la colonia, y también durante el siglo XIX. Ellos, en su tradición de raigambre española, edificaban un volumen simple, blanco y macizo hacia el exterior que rodeaba y se abría a uno o varios vacíos contenidos por él, los patios. Eran esos patios los que organizaban la vida al interior de la vivienda. De ellos la casa obtenía la luz.
El proyecto consiste básicamente en un gran volumen de planta cuadrada en el que se encuentran todos los recintos de la vivienda. Este volumen obtiene luz y ventilación natural directamente del exterior a través de fachadas vidriadas. Al mismo tiempo, sin embargo, incorpora dentro de su perímetro varios patios de distintos tratamientos, tamaños y roles. Así, se logran varios objetivos. El primero es que la superficie al interior de este paralelepípedo que conforma la casa es considerablemente mayor que la superficie techada, de modo que la capacidad de la vivienda de “afectar” su entorno aumenta. Es también importante que estos patios permiten difuminar el límite entre el adentro y el afuera, ya que en la casa se está permanentemente en un “entre”. Por último, cada uno de los patios caracteriza los recintos a su alrededor, y la manera diferenciada de tratarlos aumenta esta situación.
Entre estos patios, el primero de ellos conforma el acceso, y lo resuelve a través de una superficie dura en la que se han plantado árboles. El segundo, el núcleo de la casa, es un vacío que organiza las circulaciones y diferencia las áreas públicas de las privadas. Otros dos patios menores sirven a recintos específicos: el que articula la relación entre la cocina y el baño de visita y el que permite iluminar al baño del dormitorio principal. Por último, el patio de servicio, completa la planta.
La casa se resuelve en un nivel, a la manera de un cuerpo blanco y unitario en contraste con el paisaje que lo rodea. La altura interior de pisos a cielo de la casa es constante salvo en el sector del estar comedor donde se eleva.
Los muros son de albañilería estucada y pintada de blanco. Los cielos son de hormigón visto con moldaje de madera.
Para aumentar la fluidez en la relación entre interior y exterior los paneles vidriados del sector de estar se pliegan unos sobre otros hasta hacerlos casi desaparecer.